Después de la movilización por la calle 26, maestros se concentran frente al Ministerio de Educación Nacional (MEN) como parte de las protestas del paro educativo que ya completa una semana.

Con el sonido de cacerolas y arengas, los maestros de Bogotá y municipios aledaños demuestran su descontento con la propuesta de la ministra de Educación, Gina Parody, de negociar solo si se retoman las clases.

En la mañana, más de 15.000 profesores bajaron por la calle 26 en dirección al MEN para focalizar su protesta, que también se convocó en otras ciudades capitales.

Según la cuenta @BtaTránsito también se presentó otro bloqueo en la carrera 7 con calle 33, en el sentido norte-sur, donde cerca de 80 personas ocupan el carril de la vía.

Para el tránsito entre el oriente y el occidente de la ciudad, las autoridades recomiendan vías alternas como la avenida Las Américas y la avenida La Esperanza. El sistema de TransMilenio por la troncal de Eldorado ya está en operación.

Protestas en el resto del país

Las protestas que mantienen desde hace una semana miles de profesores de la escuela primaria y secundaria pública de Colombia continuaron hoy también  en capitales y municipios de todo el país.

El paro, que involucra a 300.000 docentes de todo el país y ha dejado sin clase a 9 millones de menores, se convocó ante la falta de acuerdos entre la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (Fecode) y el Gobierno tras más de 50 días de negociaciones.

El sector solicita mejoras tanto salariales como en la prestación del servicio de salud a sus trabajadores, así como la eliminación del examen que deben aprobar para ascender, del que aseguran tiene parámetros injustos.

Según datos de Fecode entregados a Efe, un profesor de la educación pública gana de media en el nivel básico 1'200.000 pesos (unos 500 dólares), mientras que si posee una maestría y asciende a través del citado examen, puede recibir en promedio un salario máximo de 2'300.000 pesos (unos 965 dólares).

Los maestros del sector público, además de denunciar que reciben bajos salarios, aseguran que muchas escuelas no tienen la infraestructura necesaria para trabajar con niños y jóvenes. En días pasados, la ministra de Educación, Gina Parody, calificó el paro del magisterio como "injustificado", pese a las reuniones de la mesa de concertación, debido a sus posiciones radicales.