11:07 h. viernes, 19 de abril de 2024

Un año después, Google aún pasa apuros para aplicar el 'derecho a ser olvidado'

The Wall Street Journal  |  17 de mayo de 2015 (03:25 h.)
Google

La mayoría de los miércoles, las principales mentes de Google Inc. en Europa se reúnen para decidir de qué olvidarse.

La mayoría de los miércoles, las principales mentes de Google Inc. en Europa se reúnen para decidir de qué olvidarse.

Las reuniones son una nueva rutina, que potencialmente establecerá precedentes, para un grupo de altos abogados, ingenieros y gerentes de producto en el gigante tecnológico, después de que el principal tribunal de Europa falló que la gente podía pedirle a Google que elimine enlaces en los resultados que arroje una búsqueda de su nombre.

El dictamen del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, que cumplió un año el 13 de mayo, coloca a Google en la posición incómoda de tener que revisar por su cuenta los pedidos de eliminación de enlaces, y tomar una decisión. El proceso de la decisión requiere tomar en cuenta una serie de consideraciones, incluyendo el equilibrio entre los derechos individuales de la gente a la privacidad y el derecho del público a saber.

El tribunal proporcionó poca orientación sobre cómo deberían decidirse las solicitudes, y se limitó a decir que los resultados de búsqueda deberían limpiarse si incluyen enlaces a información inadecuada, irrelevante, excesiva u obsoleta.

Esto dejó a Google con la tarea de determinar por su cuenta dónde se encuentran los límites. El caso, que estableció lo que se le conoce informalmente como el “derecho a ser olvidado”, ha generado más de 250.000 solicitudes que abarcan más de 920.000 enlaces, hasta el martes, 12 de mayo. Google ha consentido eliminar 35% de los enlaces de las solicitudes y declinó eliminar 50%, mientras que 15% siguen bajo revisión.

Las personas cuyas solicitudes han sido negadas pueden apelar a su organismo nacional de protección de datos. Esos organismos públicos después pueden acercarse a Google directamente, y pueden ordenar que el contenido sea eliminado. También pueden estar de acuerdo con Google de que petición no tiene fundamentos.

Peter Fleischer, el abogado global de privacidad de Google, ofreció un vistazo inusual de la estructura de la toma de decisiones a una reciente conferencia de privacidad de datos en Berlín. Dijo que la compañía estaba haciendo su mejor esfuerzo “para interpretar un papel que nunca pedimos interpretar, y que no queremos interpretar”.

El sistema —dejar que Google tome las decisiones— pone un ejemplo sobre cómo Europa podría elegir implementar cualquier posible ampliación del derecho a ser olvidado.

Un proyecto de ley de privacidad de la UE extendería el derecho más allá de los motores de búsqueda, a las bases de datos y otros sitios web. Sin embargo, los legisladores siguen batallando con algunos de los mismos dilemas con que Google ahora está lidiando, incluyendo cómo llegar a un equilibrio entre la privacidad y el derecho a la información. Las autoridades también están batallando si empresas como Google deberían estar realizando ese tipo de decisiones en primer lugar.

“Esto es mucho mayor que únicamente los resultados de motores de búsqueda”, afirmó Eduardo Ustaran, un abogado de privacidad de Hogan Lovells. “Es uno de los grandes debates de política de nuestro tiempo”.

Google solo ha estado eliminando resultados de búsqueda de los dominios europeos como Google.fr o Google.co.uk, pero no de Google.com, incluso cuando se accede en Europa. Eso puede simplificar encontrar resultados que han sido eliminados, lo que ha llevado a los reguladores a emitir una opinión que indica que las medidas de Google no fueron suficientes.

Los reguladores señalan que su postura se mantiene firme y que Google debería cumplir con ella o enfrentar órdenes jurídicamente vinculantes para acatar.

“Su postura (de Google) tendrá que cambiar”, dijo Isabelle Falque-Pierrotin, directora de la Comisión Nacional de la Informática y de las Libertades (CNIL), el regulador francés de protección de datos, y presidente del directorio de un organismo de asesoría paneuropeo que incluye todos los reguladores de privacidad de la UE.

Google ha desarrollado algunos criterios para cuándo eliminar los resultados de búsqueda. Las figuras públicas tienen menos margen. Los delitos cometidos hace mucho tiempo —que son más tarde suprimidos de los antecedentes penales— son más propensos a ser eliminados.

Las solicitudes, cuya mayoría son enviadas a través de un formulario digital que Google creó, primero llegan a un grupo grande de abogados, asistentes legales e ingenieros que deciden los casos fáciles, dijo Fleischer. Google tiene decenas de personas que trabajan en las solicitudes, dijo un vocero de Google.

Una foto de una mujer de vacaciones tomando el sol en topless, publicada sin su permiso, es un caso fácil. Otros casos fáciles son los de noticias publicadas hace años sobre personas que cometieron robos menores.

Los casos más difíciles son presentados al panel superior de Google. Algunas veces, el grupo de los participantes llaman a expertos externos, como abogados especializados.

Los empleados de Google discuten cada caso y después votan.

El grupo recientemente discutió un caso particularmente difícil, dijo Fleischer en la conferencia en Berlín. Un ciudadano alemán fue condenado en EE.UU. de un delito sexual que ocurrió cuando tenía 16 años. La víctima era dos años menor que él. En EE.UU., su nombre fue publicado. Bajo la ley alemana, su nombre no habría sido publicado ya que era menor de edad.

Google decidió quitar el enlace.

“Típicamente encontramos una gran mayoría a favor de una u otra decisión”, explicó Fleischer en la conferencia. “Hay algunos casos en los que estamos violentamente divididos”.