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El plan para bombardear Marte, y otras locuras futuristas de Elon Musk

El Confidencial  |  13 de septiembre de 2015 (04:17 h.)
Elon-Musk

Elon Musk, el multimillonario fundador de Tesla y SpaceX, entre otras compañias, está obsesionado con Marte.

Elon Musk, el multimillonario fundador de Tesla y SpaceX, entre otras compañias, está obsesionado con Marte. Y cuando Musk se empeña con algo no suele parar hasta conseguirlo. Su última idea: soltar bombas termonucleares sobre los polos de Marte para, eventualmente, convertir el planeta en un lugar habitable similar a la Tierra. Lo mejor (sí, lo mejor), es que no es su única excentricidad.

La idea de bombardear Marte la ha propuesto medio en serio, medio en broma en un talk show estadounidense. Aunque casi imposible, segúnvarios científicos, es un nuevo ejemplo de eso en lo que Musk es un maestro: proponer soluciones y tecnologías que suenan a ciencia-ficción. Puede parecer absurdo, pero inventar el futuro requiere casi siempre eso, ideas descabelladas. Es la única forma de crear lo que no existe. La última propuesta de Musk desde luego lo cumple.

"Marte se podría transformar en un planeta similar a la Tierra. Solo tendrías que calentarlo. Para ello hay una forma rápida y otra más lenta. La rápida es soltar bombas termonucleares sobre los polos", dijo en el programa de Stephen Colbert. La lenta sería llevar gases de efecto invernadero para atrapar la luz solar y calentar la atmósfera poco a poco a lo largo de los años. Ninguna de las dos parece ni sencilla ni aconsejable. Hasta la NASA se ha hecho eco de la propuesta tirando de sarcasmo científico: "Nosotros también estamos comprometidos con promover la exploración del Sistema Solar en una forma que proteja los ecosistemas explorados tal y como existen en su estado natural". En otras palabras: nada de bombas, Musk.

La obsesión de Elon con Marte se remonta ya a comienzos del año 2000, cuando se apuntó a la asociación Mars Society, dedicada a la promoción y exploración del planeta. Musk venía de hacerse multimillonario con Zip2 y PayPal en la era de las puntocom, antes del estallido de la burbuja. Le sobraba el dinero y tenía una fijación: la exploración espacial. Fue el comienzo de algunas de sus ideas más locas y futuritas. ¿Cuáles?

Enviar ratones e invernaderos a Marte

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El contacto de Musk con la Mars Society se produjo hace ya 15 años después de varios viajes del multimillonario a Rusia con un único objetivo: comprar un cohete. Una de sus últimas biografías, Elon Musk: Tesla, SpaceX, and the Quest for a Fantastic Future, ecrita por Ashlee Vance, relata cómo intentó convencer a los miembros de la Mars Society de utilizar uno de sus cohetes rusos para enviar (y traer de vuelta) ratones al planeta rojo.

La idea nunca llegó a materializarse y era más bien un intento de Musk por hacer que el gran público volviera a hablar de la exploración espacial y se ilusionara con Marte. El proyecto de hecho evolucionó hacía otro igual de imposible en aquel momento: construir una especie de invernadero robótico en la superficie de Marte. Se desplegaría de forma automática para criar en su interior una planta que produciría oxígeno en Marte. El primer paso para la colonización marciana, otra de sus grandes obsesiones. 

Coches submarinos

El millonario fundador de Tesla pagó casi un millón de dólares hace un par de años por hacerse con el coche submarino Lotus Esprit que apareció en la película de James Bond de 1997 El espía que me amó. Musk lo compró en una subasta en Londres pero no solo como objeto de coleccionista, sino también para hacerlo realidad.

En un comunicado a medios Musk reveló la verdadera razón de la adquisición. "Cuando era niño en Sudáfrica fue increíble ver a James Bond en la película El espía que me amó conducir su Lotus Esprit hasta un puerto, apretar un botón y transformarlo en un coche submarino. Fue una decepción saber que en realidad no se puede transformar. Lo que voy a hacer es actualizarlo con una estructura eléctrica de un Tesla e intentar que se transforme de verdad". Lo dijo a finales de 2013 y desde entonces no hemos visto ningún 'Tesla-Esprit'. Aún hay tiempo.