El tránsito de migrantes ilegales por las fronteras colombianas, que utilizan el país como paso para llegar a Estados Unidos, es uno de los posibles riesgos detectados por las autoridades de que el virus ébola entre al país.

Aunque el Ministerio de Salud señala que es remota esa posibilidad, esa cartera y autoridades migratorias han puesto en marcha protocolos para detectar posibles casos. Cifras de Migración Colombia arrojan que entre el 2012 y 2014 han ocurrido 1.046 registros migratorios oficiales (530 entradas al país y 516 salidas) entre Colombia y África. De ese total, 934 eran de Nigeria, 43 de Guinea, 40 de Liberia y 29 de Sierra Leona. Esos son los países de África occidental donde se concentra la epidemia.

Pero el riesgo no sólo es por los viajeros legales, sino por aquellos que son movidos por redes de tráfico de personas y que ingresan por las fronteras terrestres en clandestinidad. En los últimos dos años, 40 migrantes irregulares de países de África occidental han sido detectados. De ellos, tres eran de Nigeria y Guinea. Además, sólo este año 72 africanos indocumentados, de diferentes regiones de ese continente, han sido sorprendidos intentando entrar o salir del país.

“Se crearon guías y protocolos debidamente adoptados y difundidos donde se imparten las instrucciones de manejo ante eventuales casos sospechosos de enfermedades con repercusiones graves para la salud pública”, indicó Sergio Bueno, director de Migración Colombia.

En los protocolos está contenido el abecé del virus que el Ministerio de Salud diseñó, el cual fue socializado entre los funcionarios de Migración Colombia en puntos fronterizos terrestres y en aeropuertos. Eso incluye no solo medidas de cómo detectar casos de viajeros legales como los indocumentados, sino también autoprotección para los funcionarios, como el uso de guantes quirúrgicos.

“Los oficiales de Migración están atentos a la detección de síntomas y casos sospechosos tanto de esa enfermedad como de todas aquellas que representen una amenaza a la seguridad sanitaria nacional, para coordinar de manera inmediata con las autoridades de salud pública”, señaló Bueno.

El Ministerio de Salud, a través de viceministro Fernando Ruiz, explicó que en Colombia no hay evidencia de rastros de esa epidemia en el país. Y aunque el tránsito es poco, con la Cancillería se acordó un control para entregar visados a oriundos, residentes o viajeros de ese continente. Las medidas no traducen en negar los permisos de ingreso, pero sí restringirlos a personas que hayan tenido contacto con personas o familiares contagiadas.

Señaló que esta enfermedad, que ya ha causado casi 1.000 muertes en el mundo, sólo se transmite por contacto directo con las mucosas de los infectados, lo que implica un contacto cercano con la persona.