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Las razones del Gobierno para revelar acuerdos con Farc

El Tiempo  |  24 de septiembre de 2014 (17:19 h.)
Santos

Humberto de la Calle, jefe negociador del Gobierno, dijo que "no se renuncia a confidencialidad".

El jefe del equipo negociador del Gobierno, Humberto de la Calle, salió a los medios de comunicación este miércoles desde La Habana para explicar por qué se decidió revelar los textos de los tres temas acordados hasta el momento con la guerrilla: tierras, participación política y drogas ilícitas. 

De la Calle recordó que desde el inicio de conversaciones, y de acuerdo a lo establecido en el Acuerdo General del 2012, el Gobierno Nacional ha insistido en preservar la confidencialidad.

“Sin embargo, tenemos que reconocer que estos esfuerzos de transparencia no han sido suficientes y han dejado margen a la especulaciones, incluso a malintencionadas. Han puesto en circulación clase de versiones y rumores y pretenden desifromar crear desconfianza y que no corresponden a lo acordado”, señaló De la Calle.

De igual manera, De la Calle advirtió que "ha habido filtraciones de los acuerdos que han contribuido a confundir aún más a la opinión". Por eso, dijo, decidieron "coger el toro por los cuernos y hacer públicos los acuerdos que hasta ahora hemos alcanzado. Sin renunciar a la necesaria confidencialidad de futuras discusiones y acuerdos en construcción".

Ahora, dijo el jefe del equipo negociador del Gobierno, que "cada ciudadano puede ahora constar él mismo lo que hemos venido diciendo y formarse su propia opinión. Insistimos en esto: que los colombianos comparen lo que hemos informado con los textos auténticos que hoy entregamos y que comprendan la totalidad de lo pactado. Verán que hemos informado lealmente. Deberán concluir que no hay nada oculto".

Explicado esto, De la Calle procedió a repasar lo que hasta a hora se ha acordado con las Farc.

Sobre tierras

Este punto denominada ‘Hacia un nuevo Campo Colombiano: Reforma Rural Integral’, tiene 4 pilares.

El primero es el acceso y el uso de la tierra, donde se acordó un fondo de tierras para distribuirlas de forma gratuita a aquellos campesinos que, o no tienen tierra o les son insuficientes. Con ello, el Gobierno se compromete a brindar riego, crédito, asistencia técnica y apoyo para la comercialización, además de garantizar los derechos de propiedad mediante. Se mejorará también el uso de la tierra, se trabajará el tema de catastro y “la puesta al día del predial”, bajo una consigna: “el que más tiene, más paga”. Por última, el jefe del equipo negociador del Gobierno dijo que se acordó “proteger las áreas de especial interés ambiental" mediante un plan de zonificación sin frenar las alternativas económicas de comunidades y el desarrollo del país.

El segundo pilar en el tema de tierras tiene que ver con programas especiales de desarrollo territorial. “Se trata de reconstruir las regiones más afectadas por el conflicto y la pobreza que transformen esos territorios, garanticen derechos y faciliten la reconciliación”, afirmó De la Calle.

El tercer pilar se trata de planes para reducir la pobreza rural en un 50% y eliminar la pobreza extrema, en un término de 10 años. “Estos planes buscan poner el campo colombiano en un camino de convergencia con la calidad de vida en las ciudades”, agregó. Lo anterior incluye proveer a los habitantes los bienes y servicios públicos necesarios, así como salud, educación y vivienda. Además, estímulos para la productividad de la agricultura como asistencia técnica y créditos.

El cuarto y último pilar tiene que ver con un sistema especial de seguridad alimentaria y nutricional. Este consiste en fortalecer mercados locales y regionales, hacer campañas para un manejo adecuado de alimentos por parte de las familias y programas especiales contra el hambre. La vía para lograrlo, sería a través de consejos de seguridad alimentaria y nutricional en todos los territorios.

Participación política

De la Calle explicó que un primer pilar acordado en este punto fue el del surgimiento de una nueva apertura democrática, basada en la creación de nuevos partidos políticos que no dependan de la obtención de un umbral para conservar su personería jurídica, la creación de Circunscripciones Especiales Transitorias de Paz (que permitirán en las zonas más golpeadas por el conflicto la elección de representantes a la Cámara adicionales), promoción del voto, fortalecimiento de la transparencia del sistema electoral y promoción de la tolerancia en el ejercicio político.

Como segundo pilar de este punto de la agenda (“participación ciudadana para consolidar la paz”), el jefe negociador del Gobierno afirmó que se acordaron medidas como el desarrollo de una ley de garantías para los movimientos sociales, medidas para promover una cultura de tolerancia, garantías para la protesta social, promoción de espacios en medios de comunicación institucionales para dar a conocer actividades de organizaciones de la sociedad civil, revisión del sistema de participación ciudadana en los planes de desarrollo y fortalecimiento del control ciudadano a la gestión pública.

Como tercer pilar, De la Calle afirmó que se busca romper el vínculo entre política y armas, “que nadie nunca más utilice las armas para promover una causa política”, para lo cual es fundamental también que se les den garantías a quienes dejen las armas de que no serán objeto de la violencia una vez se reincorporen a la sociedad civil. El establecimiento de un Sistema Integral de Seguridad para el ejercicio de la Política, que también cobije a líderes de movimientos sociales y defensores de derechos humanos, hace parte de lo acordado en ese pilar, que también contempla la creación del Estatuto para la Oposición.

Drogas ilícitas

En este punto, De la Calle mencionó como primer componente la puesta en marcha de un Programa de Sustitución de Cultivos Ilícitos y Desarrollo Alternativo que, más allá de erradicar las plantaciones, busca transformar los territorios en beneficio de las comunidades que los habitan.

Un segundo componente habla de la prevención y tratamiento del consumo de drogas, planteados como “cuestión pública que requiere un tratamiento prioritario”. Se acordó un programa de intervención frente al consumo y un sistema de atención al consumidor.

Como tercer componente, De la Calle recordó que se acordó una estrategia para ampliar la lucha contra el crimen organizado que tiene nexos con el narcotráfico y que el Gobierno promoverá una Conferencia Internacional ante las Naciones Unidas para avanzar en la construcción de ajustes en materia de lucha contra las drogas.

Como último eje de este punto, De la Calle recordó que el Gobierno se comprometió a poner en marcha las políticas anteriormente mencionadas y que las Farc se comprometieron a poner fin a cualquier relación que “se hubiese presentado” con el fenómeno del narcotráfico y a contribuir con el esclarecimiento de la relación entre este delito y el conflicto.