El Gobierno ajustó sus cuentas para el año entrante en medio de la caída del precio del petróleo, lo que lo llevó a estimar un menor crecimiento económico para el año entrante y un mayor faltante de sus ingresos con respecto a los gastos.

Los cálculos presentados este martes parten de estimar unos ingresos provenientes del petróleo con un precio de 48 dólares por barril, que es la mitad del que se tuvo en cuenta para el presente año, de alrededor de 90 dólares por barril.

De esta manera, el déficit (la diferencia entre ingresos y egresos) será de 22,97 billones de pesos, lo que equivale a 2,8 por ciento del producto interno bruto (PIB), o sea el valor de toda la producción económica en el año.

El déficit estimado para este año fue de 2,5 por ciento del PIB, lo que muestra que en el 2015 se incrementaría dicho faltante.

Al presentar el Plan Financiero para el año 2015, el Gobierno señaló que espera que la economía crezca 4,2 por ciento el próximo año, estimación que es inferior al 4,5 por ciento que el Gobierno venía planteando hasta ahora.

Durante el acto de sanción de la reforma tributaria que entrará en vigencia el próximo año, el presidente Juan Manuel Santos aseguró que el déficit estructural del Gobierno (que no tiene en cuenta efectos coyunturales en ingresos) en el 2014 “será del 2,3 por ciento del PIB” y dejó claro que la Regla Fiscal “permite tener un poco más de déficit cuando la economía crece menos de su potencial”.

El jefe de Estado reiteró que, pese al déficit esperado, no se necesitará un endeudamiento mayor debido a que en este año el Gobierno hizo operaciones para reducir las amortizaciones programadas y las necesidades de financiamiento.

Al referirse al déficit de 2,8 por ciento del 2015, Cárdenas señaló que un 2,2 por ciento corresponde a un faltante estructural y un 0,6 por ciento, a uno cíclico influenciado por la reducción de los precios petroleros. “El déficit total previsto era 19,39 billones de pesos”.

En cuanto a la caída de los precios del petróleo, las cuentas incluidas dentro del Plan Financiero indican que en el 2015 la cotización promedio por barril para Colombia sería de 48 dólares y que el fisco dejará de recibir 9 billones de pesos en ingresos petroleros.

Sin embargo, el ministro Cárdenas manifestó que Colombia tiene las herramientas necesarias para adaptarse a un nuevo escenario de precios del crudo.

Faltante petrolero

De acuerdo con el Gobierno, la mitad del faltante petrolero (4,5 billones de pesos) se cubrirá con los recursos provenientes de la reforma tributaria. “La otra mitad representará un mayor déficit, que será a su vez financiado con los recursos que liberan las menores amortizaciones de deuda pública para el próximo año”, explicó Santos.

Dentro de los supuestos elaborados por el Ministerio de Hacienda, se estima que la tasa de cambio promedio para el próximo año será de 2.300 pesos y que el PIB ascenderá a 819,8 billones de pesos.

Cárdenas destacó que la Nación, durante el próximo año, tendrá un endeudamiento menor con los mercados de capitales –el cual equivaldrá a cerca de 1 billón de pesos–.

Esto se justifica, según el ministro, en una buena ejecución de la estrategia del endeudamiento público y en las operaciones del manejo de la deuda.

Adicional a lo anterior, explicó el jefe de la cartera de las finanzas, el Plan Financiero tiene contemplado emitir Títulos de Tesorería (TES) por 31,7 billones de pesos de los cuales 22,6 billones se colocarán a través de subastas.

Se contemplan emisiones por 2.500 millones de dólares a través de bonos en los mercados internacionales y 2.600 millones de dólares con desembolsos de la banca multilateral.

Firman la reforma tributaria

El presidente Juan Manuel Santos sancionó ayer la ley de la reforma tributaria, que se tramitó en medio de una intensa polémica, y que se espera que permita financiar el presupuesto del año entrante.

“Lo más importante es que hemos garantizado los recursos necesarios para que, en los próximos 4 años, el país siga progresando con equidad y siga cerrando las brechas entre los colombianos”, precisó Santos durante la ceremonia de sanción, en la Casa de Nariño.

El mandatario recordó que se estableció el 2018 como el último año en el que se cobrará el impuesto sobre el patrimonio (ahora nombrado como a la riqueza) y que la sobretasa al Cree irá “creciendo” para compensar la baja del otro ítem.

También dijo Santos que esta reforma tributaria garantiza la permanencia de los subsidios para la energía eléctrica y el gas en los estratos 1 y 2. “Hemos garantizado con esta reforma los recursos para continuar derrotando la pobreza y generando oportunidades para los que no las tienen”, precisó.